Desde encamina queremos compartir con vosotros el testimonio personal de Miriam, una de las organizadoras de esta jornada, que a todos nos ha conmovido e inspirado. Esperamos que os llegue tanto como a nosotros:
Y como toda bonita acción tiene su reacción, os incluimos también las palabras que Toni, con cariño, le dedica:
Para Miriam.-
Como osan llamarle parada a ella, persona inquieta
a alguien que nunca se detuvo,
a quien poseyó talento y lo retuvo,
quien atesora multitud de facetas.
Por eso tienes un ángel en el que confías,
el serafín que te escucha y protege, está siempre presente
aunque no puedas verlo. Entra y sale de repente,
te guarda, te vela, inspira… y guía.
Está contigo, a tu lado, ¿percibes su energía?
en ocasiones, no resulta sencillo, lo comprendo
sólo una sensibilidad especial, de alguien que desea continuar
aprendiendo.
Que no vuelvan a llamarle parada, ¡Menuda herejía!
Y el ángel tiene un coro de querubines blancos
que permanecemos sobrevolando unidos
meciendo tu cabello cuando duermes, guiando tus manos
azarosas, firmes, decididas. ¡Cuántas cosas compartimos!
Te ayudamos a alcanzar tus sueños,
nos haces sentir niños una vez más y aprovechar esa
inocencia
para abordar aventuras sin temor al riesgo,
acompasados a tu ritmo y a tu cadencia.